La reducción de la pobreza: una obligación de todos los Estados
- En el Día Internacional contra la Pobreza la ONU recuerda que la pobreza es un problema de derechos humanos.
- Por primera vez en 30 años, los niveles de pobreza aumentan en todo el mundo. 700 millones de personas, del 10% de la población mundial, vive en situación de extrema pobreza. En España, seis millones sufren pobreza severa. Mujeres y niñas son las más afectadas.
- La pandemia, el cambio climático y los conflictos, entre las causas del aumento de los niveles de pobreza.
- En ciudades de todo el mundo, la ciudadanía se moviliza para exigir políticas públicas que frenen la pobreza en todo el planeta.
Las cifras son escandalosas: a los 700 millones de personas que sufren pobreza podrían sumarse 500 millones más a consecuencia del impacto de la pandemia. Personas con dificultades para alimentarte, acceder a la educación, a la atención sanitaria o al agua potable. Poblaciones enteras cuyos derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales se ven sistemáticamente vulnerados. La pobreza, tal como denuncia Naciones Unidas, supone un grave problema para la garantía de los derechos humanos.
Mientras la miseria aumenta, el número de multimillonarios crece. En 2020, más de un 13%; la pandemia supuso para ellos un gran negocio. Tal como denuncian 60 agencias internacionales, “La economía global ha experimentado la peor recesión en 90 años, y los segmentos más vulnerables de las sociedades son los más afectados de una manera desproporcionada”.
La cooperación: política pública esencial
Los países que afrontan situaciones más extremas, cuyas economías estaban ya debilitadas y con altos niveles de endeudamiento, tienen graves problemas para enfrentar la situación actual. Es urgente tomar medidas colectivas que nos permitan salir de este bache de manera colectiva. Son necesarias medidas como la anulación incondicional de la deuda externa, el fin de las patentes de las vacunas contra el Covid-19 y el fortalecimiento de políticas públicas que garanticen los derechos humanos.
La política de cooperación debe ser fortalecida. Si algo ha demostrado la pandemia, es que salir de una situación tan compleja solo es posible si salimos de manera colectiva. Como venimos repitiendo desde hace tiempo, #EsHoradeCooperar.
Oportunidades para demostrar el compromiso
La semana pasada, dialogamos con distintos actores de la cooperación sobre la urgente necesidad de una cooperación realmente transformadora. El Gobierno tiene sobre la mesa varias oportunidades para demostrar que su compromiso con una cooperación a la altura de los retos actuales es real. La primera de esas oportunidades, son los presupuestos generales del Estado para 2022; confiamos en que los fondos aumenten y fortalezcan una política pública muy debilitada. La segunda es la reforma del sistema de cooperación; un proceso en el que el Gobierno puede apostar por construir colectivamente una cooperación que saque a España de la cola de Europa y asuma las responsabilidades y el lugar que le corresponde.